jueves, 29 de noviembre de 2012

He aquí un bello escrito

Hoy he vuelto a retomar la pluma
y con orgullo escribiré
a la mujer que me dió esperanzas de amar
bajo una hermosa noche de luna.

Desde las hermosas constelaciones
y desde lo ancho del universo
deseo tan ansioso
que escuchases este magnifico verso.

 - "Desde lo profundo 
    de tus entrañas
    y desde lo profundo
    de tus pensamientos
    sin temor alguno
    quisiera adentrarme una vez mas
    en lo majestuoso de tus sentimientos.

    Desde lo mas profundo
    de tu esbelto ser
    quiero dejar en tu piel de mujer
    todo mi dulce querer;
    mujer eres lo mas deseable, mi gran saber.

    Solo para ti
    dispuesto estaré
    seré tu hombre 
    bajo noches de pasión
    seré aquel que te amará
    sin tanto revuelo, sin descontrol" -


Querella

Querella

Ya no he de callar
pues ya no existe un porqué,
quiero seguir amandote
sin ser más tu febril un amor delirante.

Quiero compartir mis ultimos dias,
a tu lado;
quiero sentir mi corazón
palpitar una vez más,
siendo tú la dichosa
de este acontecimiento consagrado.

Quiero recorrer este camino, juntos,
tomados de las manos;
que nuestro mundo sea
lo maravilloso,
lo más  consagrado.

Eres vida, despues de muerte,
y amor de un ser
que casi nada, no siente;
te amaré eternamente,
cuando de este mundo, esté ya ausente.

No deseo verte llorar,
¡Ya no más!
alégrate por muchos 
que a tu vida vendrán;
por un instante te otorgué 
la mas ansiada felicidad.

Por un instante me otorgaste
el verbo amar,
por un instante me otorgaste
lo mas ancioso, lo celestial;
sé feliz ahora,
¡Márchate, vete y anda en paz!
 Mujer

Mujer, cuando seamos uno
ese uno
solo durará por un solo segundo,
cuando me marche
todo será tan distante.

Mujer, sé que llorarás
Añadir leyenda
y diras que soy intolerante,
no quiero que sufras
de tu vida, ni un solo instante.

Soy conciente lo cuánto te amé,
lo cuánto en tu cuerpo 
sin saber, plasmado quedé;
como volvieran aquellas tardes
que nos amamos con intenso querer.

Mucho fueron testigos 
de vuestros encuentros, 
ahora os digo:

 - " ¿Desde cuando cambiamos,
      si todo marchaba, hasta lo infinito? " -

En tu ser solo quedará
los besos, miradas, caricias y deseos
que en noches de seducción
se envolvían sin tanto resentimiento.

Llora, si así amerita el momento,
maldíceme, como si fuera un verdadero criminal,
por haber asesinado
aquel sentimiento intenso,
mujer, gracias por llevarme aún en tus pensamientos.